En este tercer álbum de estudio, el trío se atreve a mirar hacia adentro, explorando sus propias historias y sentimientos después de años de giras incansables y éxitos que las consolidaron como una de las bandas más influyentes del pop español.
El proceso creativo fue una apuesta por la autenticidad. Con la producción de los reconocidos argentinos Luis Lamadrid y El Malamia, Cariño amplía su paleta sonora y se sumerge en territorios musicales más orgánicos y experimentales. El resultado es un álbum que mantiene el espíritu juguetón que las caracteriza, pero con un nivel de profundidad que va directo al corazón.
Uno de los temas más impactantes del álbum, “Y Yo Que Pensaba”, lleva al oyente a un viaje emocional de guitarras rockeras, con una lírica que refleja las vueltas interminables de la memoria tras una ruptura. Esta canción encapsula el nuevo rumbo de Cariño: su habilidad para capturar la vulnerabilidad y las contradicciones del amor y el desamor, sin perder su toque característico.
A lo largo de las doce pistas, Cariño nos regala un pop que fusiona desde baladas nostálgicas a piano hasta texturas de dream pop y sonidos del UK garage, logrando un disco que rompe fronteras y desafía etiquetas. Tanto por hacer no solo es un álbum; es un manifiesto de una banda en plena evolución, que sigue fiel a su esencia mientras explora y redefine lo que el pop puede ser.
Para aquellos que buscan algo más que la superficialidad de las listas de éxitos, Tanto por hacer es un recordatorio de que la verdadera música pop también puede tener profundidad y significado. Cariño nos muestra que el pop puede ser tan real y honesto como la vida misma.